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En los nuevos tiempos se ha suscitado una tendencia de fomentar en los niños y jóvenes que potencien el talento y las habilidades en las que se destacan, y dejar de ejercer presión sobre otros conocimientos en los que no tengan destreza.
“Si es hábil con la pintura pero saca malas notas en matemáticas debemos apoyar sólo su talento con la pintura”
Con esa afirmación se está dando por sentado que no importa que aprenda matemáticas…
¿Es apropiado o correcto tener esta posición para con la nueva generación que se está formando? O debemos procurar apoyarlos para que tengan una formación de base equilibrada para enfrentar la vida en sociedad… y ya luego a nivel universitario o profesional sí que se enfoque en desarrollar al máximo su habilidad y talento… pero ya con una base general sólida.
La tendencia de los padres que empujan a sus hijos a tener éxito ha existido por un tiempo. Sin embargo, la nueva generación de niños es diferente. Son la primera generación en crecer con las redes sociales, los teléfonos inteligentes y el acceso instantáneo a la información. Es difícil para ellos encontrar tiempo en sus vidas solo para ellos y son más propensos que cualquier otra generación anterior a tener ansiedad o depresión como resultado de esta presión.
Hay un debate en curso sobre cuánta presión debemos ejercer sobre nuestros hijos para que tengan éxito. Algunos argumentan que necesitamos más equilibrio en la sociedad y otros argumentan que debemos promover el talento sin importar el costo.
Una tendencia reciente en el mundo del trabajo es que las empresas están tratando de promover el talento en lugar del equilibrio. Es una buena idea contratar personas que tengan las habilidades que necesita y luego capacitarlas en otras áreas. Esto le dará empleados más competitivos que pueden producir un mejor trabajo.
Este cambio significa que hay más puestos de trabajo para las personas que tienen niveles de educación más altos, pero menos puestos de trabajo para aquellos con niveles de educación más bajos. Por lo tanto, si no tiene una inclinación académica, puede ser difícil conseguir un trabajo en estos días. La nueva generación está creciendo en un mundo donde la idea de equilibrar el trabajo y la vida no es un tema de moda. En cambio, están más inclinados a perseguir sus pasiones y promover sus talentos.
La nueva generación es más consciente de sí misma que cualquier otra generación anterior. Saben lo que quieren y tienen las herramientas para conseguirlo. El equilibrio, la diversidad y la igualdad, son los elementos clave.
